1. La comodidad del toldo motorizado

Es indiscutible que es mucho más cómodo manejar un toldo apretando un botón que teniendo que girar una maneta. Más cuanto mayores sean las dimensiones del mismo. Y no digamos la ventaja que representa para personas de edad o con alguna dificultad de movilidad.

Recordemos que la motorización consiste en la incorporación de un sistema de apertura y cierre automatizado a tu toldo. Básicamente, existen dos modalidades de motorización mecánica por interruptor o por RTS. Ambas tienen sus diferencias que conviene valorar, pero son igualmente prácticas.

2. Optimiza la eficiencia energética

En estos tiempos, es casi imposible mencionar cualquier actividad y no relacionarla con el ahorro energético y el cuidado medioambiental. Bien, pues los toldos motorizados son una forma de mejorar su efectividad en lo que respecta a aprovechar la luminosidad y, también, en disminuir el gasto en climatización.

Es fácil entenderlo, en los meses de más calor permite tener el toldo extendido por más tiempo, de modo que se reduce la necesidad de usar aire acondicionado. Y, en los meses de invierno al revés, lo mantenemos recogido para aprovechar la fuente calorífica del sol.

3. Toldo motorizado para tu casa domotizada

La domótica ya no es el futuro de las viviendas, es el presente en cada vez más hogares. Nada más práctico que poder controlar distintos dispositivos de tu casa a distancia mediante tu móvil, tablet u ordenador.

Un toldo motorizado puede formar parte de esa domotización sin problema. Con eso, consigues que todo el resto de ventajas de motorizar el toldo aún sean más evidentes, porque ni siquiera tienes que estar en casa para poder manipularlo según necesidades.

4. Aumento de la seguridad

Cuando instalas un toldo en tu vivienda o negocio, por supuesto, tu pretensión es que dure en perfectas condiciones el mayor tiempo posible. Es verdad que los tejidos en los que se fabrican los toldos actuales ya están diseñados para que sean más resistentes que antes.

Pero, sobre todo ciertas inclemencias climáticas, especialmente el viento, la nieve o el granizo pueden dañarlos si azotan con mucha intensidad. Sin embargo, un toldo motorizado se puede recoger rápidamente en cuanto aparece cualquiera de estas inclemencias, con lo que queda protegido.

5. Un mantenimiento más sencillo con un toldo motorizado

Todo lo que suena a tecnológico o automático parece más sofisticado y, por eso, con un mantenimiento más complicado. Nada que ver con lo que ocurre con un toldo motorizado que es realmente muy fácil de mantener. Es muy simple, necesita los mismos cuidados de limpieza que un toldo manual, pero como se desgasta menos, la frecuencia de ese mantenimiento es menor.

Consulta con el equipo de expertos de Gravent las distintas posibilidades de toldo motorizado que existen. Podemos aconsejarte la que más te interesa dependiendo de tus circunstancias.