En el diseño de esta singular vivienda unifamiliar, concebida en profunda simbiosis con su jardín y el pimentero que lo preside, la ventana Hervent® se revela como una pieza fundamental para materializar la visión arquitectónica.

El proyecto, que busca disolverse en el paisaje y hacer del jardín una extensión de la casa, se enfrentaba a un desafío clave: la abundante sombra del arbolado existente dificultaba la captación solar en invierno.

La solución fue tan ingeniosa como eficaz: elevar la mirada y capturar la energía a través de la cubierta. Es aquí donde las ventanas Hervent® de Gravent, instaladas en los lucernarios elevados del comedor y el estudio, se convierten en el verdadero motor bioclimático del hogar.

Más allá de su impecable rendimiento técnico, las ventanas Hervent® definen la atmósfera y la experiencia de los espacios centrales. Permiten que la luz cenital inunde estos "patios interiores", que el verde de las hojas del pimentero se haga presente en el interior y que la conexión visual con el exterior sea constante y cambiante.