Los tres tipos de tela para toldo más interesantes

Dependiendo del material en el que se confecciona un toldo, cambian sus prestaciones en lo que se refiere a impermeabilidad, luminosidad y protección solar. De ahí que sea imprescindible que valores tus necesidades y las características de la zona en la que vas a instalarlo para sacarle todo el partido a tu toldo.

Las tres pertenecen al grupo de los llamados tejidos técnicos, es decir, que reciben un tratamiento especial para conseguir determinadas propiedades. En el caso de la tela para toldo, estas son las más usadas:

1. El poliéster

Se trata de una tela para toldo fabricada a partir de una fibra sintética que destaca por su resistencia y alto nivel de impermeabilidad. Sin embargo, en su contra hay que señalar que se deteriora rápidamente por el contacto continuo con los rayos UVA y su bajo aislamiento térmico.

Es la tela para toldo de precio más económico y, en general, se recomienda esta opción en lugares con elevado índice de humedad e incidencia de lluvias y para periodos de exposición al sol poco prolongados. Mejor utilizarla en toldos cofre o semicofre, que mantienen el tejido protegido cuando está recogido.

2. La fibra acrílica

Es la tela para toldo más frecuente en este momento, seguramente porque consigue cubrir prácticamente todas las necesidades que se exigen a este tipo de instalaciones. Sus puntos fuertes son su eficaz capacidad de aislamiento térmico y sus propiedades ignífugas. Además, la intensidad del color no se deteriora con por muy intensa y continua que sea la exposición solar. Y, finalmente, su mantenimiento es muy sencillo. Sin embargo, sus propiedades impermeables son muy reducidas.

Por lo tanto, es una tela para toldo perfecta para todo tipo de instalaciones y modelos de toldos, incluso pérgolas, siempre que sea en ubicaciones poco expuestas a la lluvia o la humedad.

3. Tela para toldo microperforada

El tejido más técnico y avanzado, elaborado con fibra de vidrio o poliéster recubiertos de PVC. Con esta fórmula se ha conseguido la máxima resistencia frente a las radiaciones solares y frente a los desgarros. Pero, su mejor cualidad es la transpirabilidad que permite que se generen ambientes más saludables, gracias a una mejor circulación del aire. De esta forma, se mejora el confort térmico a la vez que se propicia un considerable ahorro energético.

Es cierto que su precio es más elevado, pero su mayor durabilidad lo compensa a la larga. Eso sí, hay que tener en cuenta que su peso es mayor, por lo que se recomienda su uso en instalaciones motorizadas.

En materia de tejidos, en Gravent optamos por incorporar los últimos avances. Así, podemos asegurarte que la tela para toldo que elijas te proporcionará las máximas prestaciones. Visita nuestra web y podrás comprobarlo.